Como deportista de toda la vida y con innumerables lesiones a lo largo de los años, desarrollé una sincera pasión por restaurar la función basal de los pacientes y permitirles retomar sus actividades diarias o deportivas lo antes posible. Como fisiatra, doctor en función, me enorgullece abordar a cada paciente de forma integral para comprender plenamente sus síntomas y desarrollar el mejor plan de tratamiento posible. Creo que la relación médico-paciente debe abordarse con una comunicación abierta y un espíritu de equipo, y que la educación es clave para que los pacientes comprendan mejor y se responsabilicen de su atención.